Ponte trucha... Un poco de literatura para unirnos.

Literatura Oral y Escrita como forma de unión Familiar.

Guttenberg creador de la imprenta.

En el marco de la Quinta Jornada Iberoamericana de niños y jóvenes trovadores, poetas y versadores, te presentamos un interesante artículo sobre la tradición oral y la concepción de literatura.

Para iniciar queremos dilucidar (aclarar) ¿Qué es la literatura Pre-Guttenberg?

Básicamente es la oralidad, ya que a través de gestos, sonidos, imitaciones, actuaciones se narran y comparten historias. Desde recetas de cocina hasta descubrimientos sobre animales peligrosos o anécdotas personales.

Entonces tenemos que los chamanes, brujos, poetas, juglares, trovadores, cantautores, mamás, papás, hermanos, abuelos, sabios son los primeros en iniciar con la tradición de la palabra viva.

Pura transmisión de sabiduría alegre, triste, historia de la comunidad.

Pasaron muchos siglos y con la aparición de la Imprenta, invento de Guttenberg, hoy tenemos libros que guardan estos recuerdos. 

Ejemplos de literatura Pre-Guttenberg   y luego libro físico.

Las Metamorfosis de Ovidio.

Aquel poeta Romano que retoma los mitos griegos adaptándolos a la época romana. Gracias a él, la memoria de la religión Griega perdura hasta nuestros días.

Leyendas de cada rincón del mundo.

Muchos relatos como el de la llorona no tienen atribuido un autor específico, sino más bien la gente ha perfeccionado la historia de acuerdo a las características del lugar donde se cuente. Si hay vegetación que por ahí aparece, si es una ciudad entonces que por la calle más solitaria, si hay una fábrica entonces ahí es donde se escuchan gritos.

El cid campeador

Es atribuido a ese escritor tan famoso y versátil llamado: Autor y apellidado Anónimo, recuerda de la importancia de contar historias como ejercicio de memoria colectiva.

Actualmente muchas historias no llegan a los libros pero se siguen contando, con lo cual la magia sigue presente y viva. Un ejercicio muy sano y divertido que podemos iniciar en  familia es hablar sobre  nuestros abuelos o antepasados y así conservar los nombres y los actos que hayan hecho. 

Que tal antes de cenar o después de comer, podemos arrancar esta bonita actividad; puedes incluir juegos de mesa o lectura de fragmentos de cuentos, poesía y claro las anécdotas familiares.